Visitando Salento

Un territorio soleado todo el año, Salento es un tesoro oculto de arte único, exquisita cocina mediterránea y hospitalidad genuina. En esta zona se pueden encontrar panoramas fabulosos, desde la costa Adriática a lo largo de Melendugno, Santa Cesarea Terme y Otranto, hasta el mar Jónico y las playas doradas de Porto Cesareo, Portoselvaggio y Gallipolli.
Con matices de edad media oriental, la zona denominada Grecia Salentina es una tierra mágica con antiguas rimas infantiles del dialecto Griko, mientras que en ciudades como Melpignano, las rimas primitivas se convierten en ritmos contemporáneos en el festival de música folclórica Notte della Taranta.
En esta península verde flanqueada por dos mares, los misteriosos monumentos primitivos como dólmenes y menhires, conducen a olivares milenarios y paredes de piedra seca esparcidas en el campo entre Giurdignano y Minervino di Lecce. Haga una caminata a lo largo de las masserie (masías) seculares, que a menudo se han convertido en hoteles sofisticados y descubra las primeras iglesias cristianas y los molinos de aceitunas subterráneos. No se pierda las espectaculares cuevas marinas de Castro y Santa María di Leuca.
Un paseo por Lecce es un recorrido por la arquitectura barroca, con iglesias y palacios adornados con piedras, rodeados de patios, jardines secretos y un espectacular anfiteatro romano situado en el corazón de la ciudad. En Brindisi, descubra dos castillos y las vistas espectaculares del paseo marítimo Regina Margherita.
En las aldeas apartadas puede descubrir talleres de papel maché y artesanos de esculturas en piedra. La cocina local ofrece los sabores más finos del Salento, que pueden paladearse con los excelentes vinos locales; pruebe la tria (pasta hecha en casa con garbanzos), hortalizas salvajes y postres deliciosos como el 'pasticciotto' (relleno con crema pastelera) y 'spumoni” (helado artesanal).


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Villa Vetti en Ugento
Ugento, a unos 50 km de Lecce, está rodeado de olivares y está localizado en el mar Jónico, con aproximadamente 8 km de costa. Cuenta además con un patrimonio arqueológico importante. Ugento es la tierra natal de los mesapios; prueba de ello es la preciosa estatua del dios Zis (Zeus) que se remonta al siglo VI a. C., denominada "lu pupu" por los habitantes de Ugento y que se conserva en el museo de Taranto, además de los casi 800 hallazgos arqueológicos del Museo Adolfo Colosso y el nuevo museo arqueológico. Las antiguas e impresionantes murallas que rodean Ugento son otra prueba de la población mesápica. El centro histórico tiene una variedad de estilos: desde el castillo del siglo XIV hasta la catedral gótica del siglo XVII, la Iglesia de San Antonio y el palacio del obispo. La ruta fascinante que lleva a las iglesias rocosas, como la Cripta del Crucifijo y la iglesia de la Virgen de Constantinópolis, la iglesia de Santa María del Casale. Entre las torres del litoral, construidas para proteger la costa de los ataques turcos, la Torre San Giovanni es la más antigua. Actualmente, se utiliza como faro y la maravillosa costa se extiende debajo de él, con playas de arena y fondos marinos de agua cristalina.